1.-SUEÑA una idea y mantenla en tu mente y en tu corazón hasta que se convierta en una fábula.
2.-SUMALE creatividad sin detenerte hasta que explote y salga a través de ti.
3.-LIMPIALA y quítale todo lo que le sobre realmente, evitando no quitar:
* LO QUE QUIERES EXPRESAR
* A QUIEN QUIERES EXPRESARLO?
* CÓMO QUIERES EXPRESARLOS?
* EN QUÉ TONO LO QUIERES EXPRESAS?
4.-NUTRE esa propuesta con todo lo que necesita para volverse más y más abundante, llenadora y verdadera
5.-PRUEBALA una y otra vez ante el despiadado y tajante filo acerado de la crítica.
6.-ESCENIFICALA con el lenguaje de la acción verdadera y dejando que el actor o actores dejen pasar la luz a través de ellos como si fueran un cristal claro y perfecto.
7.-CUIDA el arte, la belleza, la poética y la convención que convine y amalgame con la obra
8.-CURA la dramaturgia, la lingüística, los marcajes, la mimesis y sobre todo el trabajo en equipo en donde se pueda dañar o quebrar.
9.-ENSAYALA con todos los participantes, con público y con quien la pueda criticar positivamente para hacerla crecer (o decrecer si necesita moderarse).
10.-ESTRENALA poniendo lo mejor de todos los colores que has encontrado en este proceso.
Si el resultado es el FRACASO empieza de nuevo y de nuevo hasta que lo hagas BIEN.
Si el resultado es el ÉXITO empieza de nuevo y de nuevo hasta que lo hagas MEJOR.
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